Tengo un gran amigo a quien le
dicen Condorito (como el de las historietas) que después de haber sido testigos
de una ridícula escena de pareja me dijo: Es
que nosotros estamos curados de amor.
Tenía mucha razón, nosotros
detestábamos esa clase de escenas, no nos gusta el sentimentalismo extremo y
tampoco creemos que se pierda todo si terminas una relación con alguien. Nosotros
ya habíamos pasado por todo eso y aprendimos que no vale la pena pasar por todo
eso de nuevo, por lo menos no de la forma tediosa.
Y es que cuando miras todo de
lejos, desde otro ángulo, uno más visible y lógico, o te mueres de la vergüenza
o te mueres de la risa, pues te ves en situaciones en las que prometiste nunca
ser la protagonista; pero sí, todas hemos caído en esas telenoveleras
circunstancias (no te preocupes, nadie te juzga, yo misma no me siento
orgullosa de ello) pero lo importante de todo esto es APRENDER.
Cuando mi amigo Condorito decía
que estábamos “curados de amor” no
significa que ya no nos enamoremos o ya no creamos en el amor, sino que
nosotros ya no nos dejábamos cegar ni impresionar por él.
Estar enamorado es genial y así
debería ser siempre, en el momento en el que los “Le extraño tanto” pasan a ser “Ya
no le soporto” deberíamos darnos cuenta que algo anda mal. También existen
las que lo niegan y eso ya es cosa seria, pero no soy quién para decirles que
hacer.
Solo les pido que no dejen que el
amor las cegué, recuerden siempre que estar enamorado debe ser algo bonito y
placentero, que una relación es lo que tú quieres que sea, que nadie te obliga
a estar en situaciones que no te hagan sentir cómoda o feliz y cuando aprendan
de todo esto quizás también lleguen a estar Curadas
De Amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario